domingo, marzo 09, 2025

La amistad es una especie de detergente moral: lo blanquea todo.

 


por El ciclon de Ovas El Hombre Invisible

·
—Dime una cosa, Cancio, ¿qué importa que el fallecido fuera comunista?
—Nada, absolutamente nada.
—¿Que fuera agente castrista en el exilio?
—Detalles insignificantes.
—¿Que defendiera con fervor lo indefendible en la Alianza Martiana?
—Hombre, eso es secundario. Lo verdaderamente importante es la cordialidad del diálogo.
—¡Claro! La buena educación ante todo. No importa si alguien justifica dictaduras, siempre que lo haga con un tono moderado y una sonrisa encantadora.
—Exacto, que aquí lo que cuenta es la mesura.
—Por supuesto. Yo con Max sostuve enfrentamientos sobre Cuba. Discrepamos en casi todo acerca del régimen de La Habana, pero nos tratamos con respeto y cordialidad, esas virtudes mágicas que convierten el desastre en un mero malentendido.
—Ese es el espíritu. Porque la realidad objetiva es aburrida, lo que realmente importa es que discutamos con buenos modales.
—Y que compartamos amigos, ¿verdad? Porque si compartimos amigos, cualquier desliz ideológico se convierte en una anécdota simpática.
—¡Exacto! La amistad es una especie de detergente moral: lo blanquea todo.
—Entonces, entre sonrisas y diálogos amables, el horror se vuelve literatura y la complicidad, un simple malentendido.
—Brindemos por eso.



𝐅𝐀𝐋𝐋𝐄𝐂𝐄 𝐄𝐍 𝐌𝐈𝐀𝐌𝐈 𝐌𝐀𝐗 𝐋𝐄𝐒𝐍𝐈𝐊 (𝟏𝟗𝟑𝟎-𝟐𝟎𝟐𝟓), 𝐏𝐎𝐋𝐄́𝐌𝐈𝐂𝐀 𝐅𝐈𝐆𝐔𝐑𝐀 𝐃𝐄𝐋 𝐄𝐗𝐈𝐋𝐈𝐎 𝐂𝐔𝐁𝐀𝐍𝐎
El periodista y activista político Max Edgardo Lesnik Menéndez, una figura que hizo historia en la vida republicana y en el exilio, falleció este sábado en su hogar en Miami, a los 94 años.
Nacido en San Antonio de las Vueltas, actual municipio de Camajuaní, Villa Clara, el 8 de septiembre de 1930, Lesnik fue líder de la Juventud Ortodoxa, compartió el escenario político con Eduardo Chibás y Fidel Castro, y desarrolló una labor periodística desde las páginas de la revista Bohemia y la Cadena Oriental de Radio antes de integrarse a la lucha insurreccional como jefe de propaganda del Segundo Frente Nacional del Escambray, en 1958.
Inconforme con el rumbo socialista de la revolución de Fidel Castro, abandonó Cuba en 1961. En Miami dirigió durante tres décadas la revista Réplica y mantuvo posiciones contrarias a la política de Estados Unidos hacia Cuba, lo que lo convirtió en una polémica figura del exilio, enfrentado a grupos radicales anticastristas.
Las oficinas de Réplica en Miami fueron objeto de varias amenazas de bomba y actos vandálicos, que Lesnik denunció como acciones terroristas contra sus ideas y la integridad de su familia.
Desde 1978 comenzó un acercamiento al régimen cubano que lo radicalizó como un militante antiembargo y contra las posiciones políticas de la comunidad cubana exiliada.
Se le atribuye la autoría de la frase "Cuba Sí, Yankis No".
En Miami dirigió en años recientes la organización Alianza Martiana y la emisora Radio Miami Today, de abierta defensa y reconocimiento al gobierno cubano. Con frencuencia viajaba a La Habana y tenía presencia en los medios oficiales cubanos.
El documental El Hombre de las dos Habanas (2007), realizado por su hija Vivien Lesnik Weisman, recoge aspectos fundamentales de su vida transcurrida entre dos mundos contradictorios, y su tránsito de revolucionario cubano a exiliado en Miami.
En 2020, Lesnik perdió a su esposa y compañera de por vida, Miriam Alvarez, a los 88 años. En febrero de 2023 murió su hija, la abogada y escritora Mirita Lesnik-Chávez, a causa de una esclerosis múltiple. Mirita era esposa de Fernando Chávez, hijo del legendario líder sindical César Chávez.
Con Max sostuve muchos enfrentamientos por el tema cubano y discrepábamos en casi todo lo relacionado con el desempeño del régimen de La Habana, pero agradezco que pudimos relacionarnos con respeto y cordialidad. Compartimos amigos y la amistad auténtica siempre deja huellas valiosas.
Fue muy controversial por sus respaldos a ultranza del régimen cubano, pero su conducta fue de respeto y comunicación, aun en las profundas divergencias. RIP.

No hay comentarios: