Por Rogelio GARCIA
El librito de Añel, el policía que se las da de escritor, sigue cargadito de contradicciones y difamaciones, como si fueran decoraciones navideñas. Y para colmo, se atreve a citar a personajes como el tal Fernández Pequeño, un engendro que apenas se sostiene en pie por tanta incongruencia que carga.
Pero claro, lo que el buen Añel no nos cuenta en su panfleto disfrazado de libro es que el mismísimo Fernández Pequeño, un exsecretario del PCC en la Casa del Caribe, con su pasaporte siempre listo y su papel de guía turístico para los altos mandos del Ministerio de Cultura, fue uno de los que no dudó en aplaudir, defender con entusiasmo revolucionario la presencia del esbirro López Sacha en la Feria del Libro de Tampa.
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