la flamante Asociación de la Brigada Hermanos Saíz, establecida nada menos que en la Nueva Casa del Joven Creador en Hialeah

 

por Rogelio Garcia 

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Otro tentáculo de la cultura oficial y sus instituciones ha comenzado a recoger los frutos de su última siembra: la flamante Asociación de la Brigada Hermanos Saíz, establecida nada menos que en la Nueva Casa del Joven Creador en Hialeah, la ciudad que, cómo no, "progresa".

Claro, no hay tradición que se respete más que la de copiar y pegar aquel modelito de "poeta-trovador" que dio forma a la cultura en los años 70 en Cuba. Nada como repetir fórmulas añejas en un contexto que, supuestamente, debería respirar aire fresco.

Y lo mejor de todo es que este domingo, como plato fuerte, estarán dos grandes personalidades de la cultura miamense. Entre ellos, un poeta que acaba de lanzar un libro en el que, con gran fervor, arremete contra la "ignominia" del castrismo en tierras de libertad.

Sí, sí, un acto poético de rebeldía que seguramente pondrá fin a décadas de autoritarismo cultural… en teoría. Lo paradójico es que, mientras tanto, todo esto ocurre bajo la supervisión de un promotor que bien sabe cocinar a fuego lento los mismos ingredientes de siempre, aliñados con el discurso correcto. !Viva la cultura revolucionaria!

¿El resultado? Pues la misma sopa recalentada de siempre. Cambia la escenografía, pero los actores siguen representando el mismo drama castrista. Nuevas caras, pero con los mismos guiones y, cómo no, con el mismo control disfrazado de liberación cultural.

Aquí estamos, en pleno exilio, repitiendo el mismo dueto del control bajo el nombre de la libertad.