En materia de odio estamos servidos. Algunos elementos que se dedican a las maniobras de perdedora de tiempo, y manipulación en la blogosfera cubana, andan sueltos y sin vacunar, con un ADN fluorescente, perceptible para el que sepa leer y sienta esa peste a oportunismo barato, brutalidad y falta de inteligencia y respeto que les acompaña.
¿Es siempre el odio motivado por el gigante rojo, la ira? Una persona que vio ser embestida la embarcación y fue arrojada por la borda con un chorro de agua potente, se vio presa del miedo en las aguas profundas luchando por su vida, tiene una ira inmensa que alimenta constantemente el odio hacia los agresores. ¿Cuál es el motivo del odio de aquellos que ni sufrieron prisiones, ni persecuciones, ni mítines de repudio, ni fueron expropiados e incluso recibieron durante un tiempo prebendas y privilegios? ¿Existe verdaderamente ese odio sin ira o sólo es un show para estar en homogeneidad con el entorno? El post completo y que recomiendo en El látigo cubano
Aprovecho la entrada de El látigo cubano, para abundar en el tema.
Plutarco mencionaba: “Nace el odio de imaginar que el odiado es una persona dañina ya sea en general o respecto a uno mismo, pues quienes creen recibir un trato injusto odian de una forma natural. Los hombres reprueban y miran con disgusto a los que, de alguna manera, se inclinan a la injusticia o a la maldad, pero la envidia la sienten simplemente de quienes parecen prósperos. Por eso la envidia parece limitada como una afección de la vista que reacciona ante todo lo luminoso, mientras que en el odio tiene límites y se basa siempre en unos fundamentos”.
Se ha demostrado que el odio, tiene un componente genético, susceptible de controlarse con medicamentos y trabajo sicológico, - en casos extremadamente avanzados, el ente putrefacto no es salvable y, la mayoría de las veces se queja de “la agresividad” con que es denunciado su malsano juego, generando una catarsis del veneno que le contamina, imponiendo el “odio prepotencia”, el odio que mata lo mejor del ser humano.
Estos “enfermos” utilizan un estado delirante de misoginia, banalidad, rebaja moral, chapucería desmontable, y el epíteto “castrista”- (cuando no andan en el CDR se sienten indefensos) que se liga con la vanidad y el rastreo (a ver que se pierde o suena por ahí para apropiárselo, "como me hago de un nombre, oficializo mi seudo troliano, y gano algo",-repiten hasta cuando comentan haciendose pasar por graciosos en los blogs- siempre ganar sobre la cabeza de otro pues LOS CASTRO es lo de menos, si arriban a abrir negocio).
Si, hay ejemplos de odios anclados más abajo que la medula. Constantes y gritones, como si desearan pervertir, contagiar con su enfermedad al resto.
Si, por suerte, hay quienes denuncian abiertamente la falta de escrupûlos de esos "Tiratira Quapuntoyo",su babeo toxico y degradante para cualquier cubano que anda en estas -que nadie se haga el tonto, tenemos 51 años de experiencias - ; saludables comentaristas del tema cubano que hacen prueba de honestidad, y no andan en la hipocresía , no ceden al chantaje, la moda, lo útil y lo compuesto- hace tiempo que abandonamos el medioevo señores, aunque algunos sigan chupando piedras-; quienes critican y ejercen el derecho a expresarse libremente, sin buscar la medallita o el estándar de la oficialidad , consentida e intocable, de la disidencia cubana. Hay espacios que señalan los estercoleros, aunque después nos caiga arriba “la odio-letanía de tales basureros”
La agresividad tiene un origen biológico, pone en juego al hipotálamo, esa parte del cerebro primitiva, funcional. No es en absoluto gratuita, tiene como fin la supervivencia del individuo y su trabajo es, en principio, una reacción de lucha contra el medio. El odio es mas profundo, es la inundación completa, donde el reptil se apodera de los valores humanos, para servirse de estrategias y defecar sobre la creencia de la gente.
La deshonestidad no merece pliegue, ni caricia; se esconderán, disfrazarán y harán los shows que deseen para adquirir forma y ventajas, pero la cueva se deteriora. Esto es una guerra contra la dictadura, no un macht de oportunistas y aprovechados. Es bueno señalarlo porque la alerta, la critica, y el criterio justo chasquean sobre la indiferencia, y la bobería circunstancial de los amaestrados.
¿ A quién la culpa … la educación, el fomento a la bajeza propio del comunismo, y su tropita de trolles y mandaos a desunir y a desencantar con sus Mojones en el camino, el periodo especial, el hambre, el asalto de la medusa dormida,- doy golpes de estado en cada espectáculo y me hago jefa -de qué, si no hay republica, libertad, ni democracia- los agentitos excitados de dar pau pau al cubano, las cónsules en caníbal, los intelectuales yo no me embarro las manos…y la pira de "soy bueno y como la cago"? Toda esa pandilla es ajena a aquel sentimiento que aprendí en casa y del único que estoy orgullosa como cubana, la bondad.
A esos que han sufrido mi abrazo; se hará justicia, pero no, con los dramaturgos del absurdo, que no han metido un pie en Cuba, fueron los hijos de ...fulano; trabajaron para zutano; abrieron blog ayer y dominan el cosmos, inventos, chiflados de poder, grajeadas gallinas de huevos cluecos que aletargan el proceso libertario, el cambio.
Se han olvidado tantas cosas…que es bueno recordarlo...lo que se siembra en mayo, da buena cosecha.
